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Rosario de las Lágrimas
de Sangre
Nuestra Señora de las Lágrimas
Antes de comenzar, leer nota nuestra al final.
Al final versión imprimible.
Esta Corona o Rosario
fue entregado por Jesús a la Hermana de Jesús Flagelado (Amalia Aguirre), en
Brasil en el año 1929.
Hija Mía: Lo que los
hombres me pidan por las Lágrimas de Mi Madre; Yo concedo
La Siempre Virgen María a Amalia el 8 de Marzo de 1930:
Mi Hijo Me quiere honrar especialmente con esas invocaciones, más allá de eso,
ÉL concederá todos los favores que fuesen pedidos por los merecimientos de Mis
Lágrimas. Este Rosario alcanzará la Conversión de muchos pecadores,
especialmente de los poseídos por el demonio. Por medio de este Rosario el
demonio será derrotado y el poder del infierno destruido. Ármense para la Gran
Batalla.
Jesús:
“¡Hijos que estáis en mundo! ¡Subí las escarpadas del Monte Calvario, yendo a
buscar estas perlas preciosas, las Lágrimas de Mi Madre! ¡Me costaron Dolor
infinito, cuando clavado en lo alto de la Cruz YO La veía llorando con tanta
angustia! Subí el Monte Calvario para buscarlas… Si, es necesario subir por
encima de sus inclinaciones y voluntades, despreciar el mundo con sus mentirosas
promesas, para poder recoger en su alma las perlas preciosas. Os hablo aquí
espiritualmente, porque Mi Reino es todo Espiritual.
No es
la simple agua derramada de los ojos purísimos de Maria. Lo que deseo que
recojáis es el Fruto de Sus Angustias, el Dolor de Su Alma y de Su Corazón
Maternal, que La hizo derramar tantas Lágrimas, a los Pies de la Cruz. Amados,
¡he aquí porqué ellas Me son tan queridas y por ellas obtendréis todo lo que
deseáis! Aprovechad de estas Lágrimas Benditas, para la Conversión y
Santificación de vuestra vida. Son perlas preciosas, porque con mucho Amor os
fueron dadas. Os recuerdo que Mi Madre lloró por vuestras almas comprándolas con
Lágrimas, cooperando con el Divino Hijo en vuestra redención: YO derramé Mi
Sangre y ELLA derramó Sus Lágrimas.
El Rosario del las Lágrimas
tiene 49 cuentas pequeñas
divididas en 7 partes. Semejante al Rosario de los Siete Dolores, tiene, en
lugar de la Cruz, una medalla de Nuestra Señora de las Lágrimas.
Oración Inicial
Jesús crucificado: Postrados a Tus pies, Te ofrecemos las "Lágrimas
y Sangre" de aquella, que Te acompaña con tierno amor y compasión en Tu vía-crucis,
Concédenos la gracia, Oh buen Maestro, de tomar a pecho las enseñanzas
contenidas en las "lágrimas y sangre" de Tu Santísima Madre, para cumplir Tu
voluntad de tal manera, que un día seamos dignos, de alabarte y glorificarte por
toda la eternidad. Amén.
En las cuentas mayores se rezan
Uno de los 7 dolores
(señalados más abajo, partiendo del primero hasta el séptimo).
Luego se dice lo
siguiente:
Oh Jesús mío, mira las lágrimas y sangre de aquella, que te
tenía el amor más grande en la tierra y Te ama con el amor más fervoroso en el
cielo.
En las cuentas menores se rezan
Oh Jesús escucha nuestros ruegos por las "lágrimas y sangre"
de Tu Santísima Madre.
Al final de las primeras
siete se reza:
Oh Jesús mío, mira las lágrimas y sangre de aquella, que te
tenía el amor más grande en la tierra y Te ama con el amor más fervoroso en el
cielo. (3 veces)
Luego comenzamos con el
segundo dolor y así sucesivamente.
Oración Final
Al finalizar el rosario
se reza la siguiente oración de término:
Oh María, Madre del amor, de los dolores y de misericordia
Te suplicamos, reúne Tus ruegos con los nuestro para que Jesús, a quien nos
dirigimos, en el nombre de Tus "lágrimas y sangre" maternas, escuche nuestra
suplica concediéndonos con las gracias que te pedimos la corona de la vida
eterna. Amén.
Tus "Lágrimas y sangre", Oh Madre dolorosa, destruya el
reino del infierno. Por tu Divina mansedumbre, Oh encadenado Jesús, guarda al
mundo de los errores amenazantes.
Los Siete Dolores
(Para las cuentas mayores)
1. Por la Profecía del Anciano Simeón
2. Cuando se vio obligada a huir a Egipto, escapando de la
persecución de Herodes que quería matar a su Hijo Amado.
3. Cuando buscó por tres días a su Hijo que lo daban por
perdido.
4. Cuando encontró a su Divino Hijo cargando en brazos la
pesada cruz rumbo al Calvario para ser crucificado en ella por nuestra salvación.
5. Cuando vio a su Amado Hijo ensangrentado y agonizante
durante tres horas y luego morir en la cruz.
6. Cuando su Amado Hijo, traspasado el pecho por la lanza,
es bajado de la cruz y depositado en sus brazos.
7. Cuando contempló el Cuerpo de su Divino Hijo en el
sepulcro
Promesas del Sagrado
Corazón de Jesús a los que recen diariamente el Rosario de las Lágrimas de
Sangre
Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a Marcos Tadeu, Jacareí, Brasil
“En este día, 6 de marzo de 2005, Nuestro Señor Jesucristo hizo 10 Promesas para los que rezaren el Rosario de las Lágrimas de Sangre de Nuestra Señora todos los días. Oigamos las Promesas del Sagrado Corazón:
No morirán de muerte violenta.
No conocerán el fuego del infierno.
No serán flagelados por la miseria.
No conocerán las llamas del Purgatorio.
No morirán sin antes recibir el Perdón de Dios.
Serán confortados por Mi Madre en persona en la agonía.
Serán trasladados por Ella y colocados al lado de Su Trono de Reina del Cielo.
Ocuparán el Coro de los Mártires como si hubiesen sido de hecho en la Tierra.
No se condenarán las almas de sus parientes hasta la cuarta generación.
En el Paraíso seguirán a Mi Madre por toda parte y tendrán un conocimiento, una felicidad singular, que otros que no habían rezado el Rosario de las Lágrimas de Mi Madre no tendrán.
Promesas de María
Santísima
Pondré paz en sus familias.
Serán iluminados en los Divinos Misterios.
Los consolaré en sus penas y acompañaré en sus trabajos.
Les daré cuanto me pidan con tal que no se oponga a la voluntad de mi Divino Hijo y a la santificación de sus almas.
Los defenderé en los combates espirituales con el enemigo infernal, y los protegeré en todos los instantes de sus vidas.
Los asistiré visiblemente en el momento de su muerte: verán el rostro de su Madre.
He conseguido de mi Divino Hijo que los que PROPAGUEN ESTA DEVOCIÓN (a mis lágrimas y dolores) sean trasladados de esta vida terrenal a la felicidad eterna DIRECTAMENTE, pues serán borrados todos sus pecados, y mi Hijo y Yo seremos “su Eterna consolación y alegría”.
La
Medalla
La Medalla de Nuestra Señora de las Lágrimas realizó numerosas Conversiones no solo en Brasil. Hubo más noticias todavía de intervenciones singulares y hasta curas milagrosas, gracias a la recitación del Rosario de Nuestra Señora de las Lágrimas. La razón se encuentra en la Promesa del propio Salvador, que no rechaza ningún pedido que Le sea hecho por las Lágrimas de Su Madre Santísima.
También en Alemania, Bélgica y Holanda muchas Gracias fueron concedidas a las personas que rezaron durante nueve días seguidos el Rosario de Nuestra Señora de las Lágrimas, recibieron los Sacramentos e hicieron obras de Caridad. Para muchos religiosos y religiosas la recitación de este Rosario se volvió para ellos un hábito muy querido y a él deben muchas Gracias, incluso extraordinarias. Piden por la Conversión de los pecadores, de los herejes y descreídos, por los sacerdotes y misioneros, por los moribundos, y para liberar las almas del Purgatorio.
Esta Medalla es oval, se encuentra acuñada en el frente la Imagen de Nuestra Señora de las Lágrimas y envolviendo su Bellísima Imagen la Oración: “OH VIRGEN DOLOROSÍSIMA, VUESTRAS LÁGRIMAS DERRUMBAN EL IMPERIO INFERNAL” del otro lado hay una Imagen de Nuestro Señor Jesucristo y la Oración: “POR VUESTRA MANSEDUMBRE DIVINA, OH JESÚS MANIATADO SALVAD EL MUNDO DEL ERROR QUE LO AMENAZA.
Importante:
Este
Rosario no es parte de los 7 Rosarios (ver link Medalla de la Paz), que la
Santísima Virgen (advocación de Reina y Mensajera de la Paz), entregó a Marcos
en Jacareí, sin embargo María pide que se rece este antiguo rosario (1930). En el 2005,
el Sagrado Corazón de Jesús entrega algunas promesas a quienes lo recen
diariamente por el resto de sus vidas.
Existe
también la Tricena, pedida en Jacareí, consiste en rezar este rosario, todos los
meses por trece días. Se comienza los días primero y se finaliza los días trece
de cada mes. Hay muchos que la rezan así, Usted también podría unirse.
ANEXO
La Imagen
El Manto Azul
“¿Por qué uso un Manto Azul? Para que te acuerdes del Cielo, cuando estuvieres exhausta por los trabajos y cargada con la cruz de las tribulaciones.
¡Mi Manto te recuerde que el Cielo te dará felicidad indecible y alegría eterna y esto debe dar ánimo a tu alma y paz a tu corazón, para continuar la lucha hasta el fin! Desear el Cielo, amada Mía, es una dulce consolación, pues el alma fue creada para gozar de esta felicidad, y debe acordarse de ella y desearla. Dios creó el Cielo para sus hijos y ¿por qué no han de pensar en él? Este Cielo es Dios mismo, por lo tanto desearlo es desear a Dios. Deseando darte ánimo, Me presenté a ti revestida de Azul. Así, cuando Me contemplares, acuérdate del Cielo que encontrarás después de este peregrinar.
No
seas egoísta, cuando traigas a alguna persona a los pies de Mi Imagen, cuéntale
lo que te conté, para que todos tengan la misma consolación. Al mirarme
fijamente cuéntales que Yo Soy Madre de todos los hombres, de los más pobrecitos
y hasta de los criminales. Todos tienen derecho de llamarme Madre, porque por
todos los hombres Jesús expiró en la Cruz. Alma misionera, no te olvides del
significado del Manto Azul de tu Madre Lacrimosa. Aprende y transmite a todos
los hombres de buena voluntad.”
La Túnica Violeta
“¿Conoces el significado de Mi Túnica rojo-violeta? Voy a explicarte lo que debes recordar, delante de esta Imagen Mía de las Lágrimas. En los colores que usé, el rojo significa dolor. El dolor que Jesús sintió cuando golpearon bárbaramente Su Cuerpo. Mi corazón de Madre y Mi Alma también fueron dilacerados por el dolor, al ver a Jesús. Cuando vieres a Mis Pies, viendo Mi túnica, acuérdate de cuánto Yo sufrí. Haciendo la meditación de Mis Dolores, ganarás fuerza para tu alma más allá de merecer el privilegio que a ellas fue concedido, que es la liberación de las penas del Purgatorio. Meditar en cuánto Yo sufrí por tu amor, es un deber de gratitud. Graba bien en tu corazón estas lecciones, porque ellas te darán fuerza y valentía en esta tierra para que un día puedas estar en Mis Brazos de Madre, que te introducirá en el Cielo.”
El Velo Blanco
“Misionera, voy a explicarte por qué Me presenté con el Velo Blanco, envolviéndome el pecho y cubriéndome la cabeza. Blanco significa pureza y, siendo Yo la blanca flor de la Santísima Trinidad, no podía dejar de presentarme sin esta albura. La pureza transforma el hombre en Ángel y esta virtud es tan querida de Dios. Jesús llamó a los puros de bienaventurados. ¡Por ser pura Dios Me escogió como Madre de Jesús, por ser puro escogió a José como Padre Adoptivo, Juan por ser puro reclinó su cabeza en el Pecho Sagrado de Jesús! La Santísima Trinidad quiso así presentarme a este Instituto, revestida con el Velo de la Pureza, virtud y cualidad de Dios, porque en ÉL todo es puro. Me presenté no solamente con la Cabeza cubierta de blanco, sino, también el Pecho. Esto porque ahí reside el Corazón, ¡del cual nacen las pasiones desordenadas!
Por lo tanto, tu
corazón debe estar siempre envuelto de esta blancura celestial, que te dará la
felicidad de ser morada de la Santísima Trinidad. Graba bien en tu alma estas
lecciones, porque ellas te servirán de Luz y Fuerza para poder subir el Calvario
y llegar a la puerta de la Jerusalén Celestial en Mis Brazos de Madre.”
La Corona de Perlas
“Hija, voy a hablarte sobre el Rosario que traía en Mis Manos. Llamadlo de “Corona de las Lágrimas.” ¡Cuando a Mis Pies vinieres, viendo en Mis Manos esta Corona, acuérdate que ella significa Misericordia, Amor y Dolor! ¡Yo Soy la Madre de la Divina Misericordia! Lloro delante de Mi Hijo los pecados de todos los hombres y siempre estoy intercediendo delante del Trono del Altísimo por los pobres pecadores. Cuando un pecador fuere rebelde no queriendo oírte, ven a Mis Pies y pide por Mis Lágrimas Benditas. Si él fuera alma de buena voluntad, alcanzarás de Dios la Gracia de esta alma no perderse.
Mi Corona de las
Lágrimas también debe recordarte Mi Gran Amor por los pecadores. Siendo Madre de
todos los hombres y viendo a muchos perderse, lloré por aquellos que,
endurecidos, corren el riesgo de precipitarse en el infierno. ¿Por qué le di el
nombre de Corona? Porque Mis Lágrimas fueron coronadas por Mi Divino Hijo; ellas
son Benditas y muchas generaciones las exaltarán por los beneficios recibidos
por Su intermedio. ¡Mi Hijo Las coronó con tantos privilegios! Jesús dio estas
perlas preciosas a este Instituto para que ellas hagan parte de su patrimonio,
La Corona de Mis Bendecidas Lágrimas significa que tu Madre te Ama. Usa de todos
sus privilegios, desde que recurras con confianza y amor. Alma querida,
aprovecha de estas lecciones y medita en el significado de Nuestra Señora de las
Lágrimas, YO con todo Amor digo: ¡Soy la Madre de las Misioneras!”
La Sonrisa de Nuestra Señora de las Lágrimas
“¡Cuando María descendió del Cielo y vino hasta vos, traía en Sus Labios una Dulce Sonrisa, por la inmensa alegría de poder obsequiar a los hombres con tan precioso Tesoro!
La Sonrisa es siempre el desbordamiento de Alegría y Paz, por eso, María quiso traerla en Sus Labios para mostrar lo que tantas almas experimentarán al rezar esas súplicas tan conmovedoras. He aquí por qué Su Imagen debe ofrecer una dulce sonrisa, que será el bálsamo a las llagas de la pobre humanidad. Te entrego en el día de hoy esta Sonrisa Bendita de Nuestra Madre Lacrimosa. ¿Madre Lacrimosa con Sonrisa? Si, Lacrimosa porque un día Lloró de Dolor y de Amor, pero que, Feliz, entrega como fruto de estas dos causas sublimes, ¡Su Sonrisa! ¡Recibe, por lo tanto, la Sonrisa de María como patrimonio de la amada generación! La Sonrisa de María, que es más dulce que la miel, constituirá también una red, que apañará las almas que desean la Santidad. ¡Ella fascinará millares y millares de almas! ¡Recibid, hijas, las Sonrisas de María! Que ellas sean una realidad en vuestros labios, para que, a imitación de María, podáis mostrar a los hombres que os sentís felices en poder trabajar por amor. Las almas quedarán seducidas, ¡porque la Sonrisa de María a todos seduce! Que este presente de inmenso valor sea aprovechado y que la Sonrisa de Nuestra Madre Lacrimosa no sea olvidada por nuestra generación. Jesús, que hoy te entrega esta dádiva, joya riquísima.”
Mis Ojos inclinados
“Voy a explicarte el motivo por qué aquí Me presenté con Mis Ojos hacia abajo. Pintores inspirados Me grabaron en las telas, vueltas Mis Miradas hacia lo alto, cuando desearon cantar las Glorias de Mi Inmaculada Concepción.
¿Qué significará, ahora, Mis Miradas inclinadas hacia abajo en esta Aparición,
en que os entregué Mis Lágrimas Benditas?
Significan Mi Compasión
por la humanidad, pues Yo descendí del Cielo para traer un alivio a sus males.
Mis Ojos siempre estarán vueltos hacia sus penas y aflicciones, toda vez que
pidieren a Mi Hijo por las Lágrimas que derramé. Y a los Pies de Mi Imagen vean
que os fijo con miradas de compasión y de cariño. Por eso Mis Ojos inclinados,
cuando entregué Mi Corona, son los faroles para todos Mis hijos que quisieren
honrarme en Mis Lágrimas.
Donde se rece la Corona
de Mis Lágrimas, estarán Mis Ojos, para mostrarles Amor y afecto. Donde se
recite con amor estas Jaculatorias de Mi Corona, allí estaré como Madre
solícita, a apuntarles los errores, invitar a la Virtud y a indicar el Corazón
de Mi Hijo Amado. Donde fuera introducida y reine esta Imagen, Mis Miradas
cubrirán a todos de grandes Gracias, dándoles, ya en esta vida, a experimentar
Mi Protección consoladora. Ve, como en la Aparición, en que ofrecí Mi Tesoro,
todo tiene significado. La inclinación de Mis Ojos representa bien Mi Compasión
por los hijos de la Tierra, que siempre invito a buscar Mis Lágrimas, porque
ellas os preparan para recibir muchas Gracias. Mis Ojos inclinados son una
invitación constante a Mis hijos, la suavísima melodía, que invita a los
pecadores y los convierte para el Corazón de Jesús Crucificado. Ahí tienes la
explicación: En esta Aparición incliné Mis Ojos sobre la humanidad, pues deseo
que ella se Convierta y se Salve atraída por Mis Miradas. Soy Madre
complaciente, dulce y llena de Misericordia.”
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